Nómina y gasto corriente absorben casi el 90% del presupuesto del Ayuntamiento de Puerto Vallarta
“El margen es poco para poder priorizar acciones de obra pública, pero hemos sido muy conscientes y cuidadosos con todo el recurso que ingresa al municipio para tener más beneficios para la ciudadanía”, reconoce el tesorero municipal

Por Osvaldo Granados
A menos de dos meses de concluir este 2025, la Hacienda Pública Municipal de Puerto Vallarta ha visto sus finanzas muy apretadas, al grado de recurrir a solicitar adelanto de las participaciones estatales, es decir, recursos del gobierno estatal, por un monto de 100 millones de pesos, recursos que se han destinado básicamente a nómina y prestaciones de los empleados como su bono anual del burócrata o servidor público.
FINANZAS MUNICIPALES CON POCO MARGEN DE OBRA
El presupuesto total del municipio para 2025 asciende a 2 mil 658 millones 121 mil pesos, lo que representa un aumento de poco más del 15 % respecto al año anterior. Sin embargo, más del 80 % se destina a gasto corriente, dejando un margen muy reducido para inversión en obra pública o infraestructura social.
“El gasto corriente, que incluye nómina y todos los gastos operativos, es de arriba del 80 %. Es cierto, el margen que queda es poco para poder priorizar acciones de obra pública, pero hemos sido muy conscientes y cuidadosos con todo el recurso que ingresa al municipio para tener más beneficios para la ciudadanía”, declaró Pérez Hernández en entrevista para Medios UdeG.
Entre los principales rubros de gasto corriente se encuentran energía eléctrica, agua, papelería, materiales de oficina y mantenimiento de dependencias, además de los salarios de más de 4 mil empleados municipales, incluidos funcionarios de confianza y sindicalizados.
MÁS RECURSOS PARA 2026, PERO MISMA PRESIÓN PRESUPUESTAL
De cara al próximo año, el Ayuntamiento de Puerto Vallarta ha aprobado un presupuesto de alrededor de 3 mil 100 millones de pesos, sustentado en la recaudación de nuevos impuestos, derechos y aportaciones federales.
Pese a ese incremento, el desafío financiero seguirá siendo el mismo: equilibrar la operación del gobierno sin comprometer la inversión pública.
El panorama refleja un gobierno con altos costos de funcionamiento, donde la mayor parte de los recursos se destinan a sostener la estructura administrativa, dejando poco espacio para nuevas obras o proyectos de impacto social.
El 2026 será un año con ingresos y presupuesto de egresos 100% diseñadas por el gobierno municipal en turno, ya que este 2025 operó con un presupuesto aprobado por la administración municipal anterior.




