Francisco Villa, de camino viejo y desolado, a avenida con gran vocación comercial del puerto
El conocido Camino Viejo, que se tenía que cruzar para llegar a El Pitillal, dejó de ser precisamente eso, viejo; cambió de vocación y ahora es comercial y de servicios, ya que son cientos de negocios los que cada vez más eligen estar a lo largo y ancho de lo que ahora es la avenida Francisco Villa
Por Hugo Camarillo
Lo que un día fue un camino con dos carriles de pura terracería con sembradíos a los costados, después empedrado, y finalmente pavimentado y con cuatro carriles, dos de ida y dos de vuelta, ahora cambió y se convirtió en una de las zonas más transitadas del puerto y con mayor cantidad de comercios y servicios.
El conocido Camino Viejo, que se tenía que cruzar para llegar a El Pitillal, dejó de ser precisamente eso, viejo; cambió de vocación y ahora es comercial y de servicios, ya que son cientos de negocios los que cada vez más eligen estar a lo largo y ancho de lo que ahora es la avenida Francisco Villa.
Unidades médicas, plazas comerciales, escuelas públicas y privadas, tiendas de ropa, venta de comida, establecimientos de conveniencia, restaurantes, venta de artículos de vehículos, estaciones de radio, gasolineras, bancos y hasta una funeraria, por nombrar algunos negocios, es lo que ahora está establecido en la “Pancho Villa”, como muchos la llaman.
Luego de realizar sondeos y una investigación, aznoticias.mx logró recabar información respecto al tiempo que tiene esta avenida en su nueva vocación comercial, y fueron tres motivos principales los que mayormente resultaron.
El primer motivo es la “naturalidad” de la ciudad, esto indica que como el puerto se encuentra en crecimiento desde hace algunos años, los empresarios y familias deciden poner sus negocios en otros sitios lejos de donde está la mayoría, para así acaparar lo poco o mucho para ellos, además del tipo de negocios se prestaba para estar a un “extremo” del centro histórico del municipio.
El segundo punto fue la construcción y apertura de lo que anteriormente era un mega terreno baldío y que ahora es la colonia Fluvial Vallarta, lo que trajo más agilidad, mayor tráfico, movimiento y prestigio hacia la zona, además de muchos semáforos.
Con la llegada de Fluvial Vallarta, de tener simplemente terrenos baldíos, ahora son lotes comerciales ubicados sobre la avenida Francisco Villa, y que se encuentran en auge construcciones grandes y nuevas que buscan acaparar todo tipo de mercado, desde los que viven cerca, hasta lo que van de pasada.
El tercer motivo que se encontró, pero no menos importante, fue el despunte que tuvo principalmente la delegación El Pitillal, en tanto a los habitantes y el crecimiento económico, ya que dicen, es el motivo por el cual la gente transita la avenida Francisco Villa o el Camino Viejo, para ir al Pitillal, que cuenta con la plaza más concurrida y la iglesia católica más visitada del destino; tanta importancia es la que tiene que ya hay tour donde dan un recorrido a los turistas, principalmente extranjeros, por la manzana principal de la delegación que tiene actualmente alrededor de mil 200 negocios comerciales tanto formales como informales.
A pesar de ser ahora una de las avenidas más transitadas, la Francisco Villa, se encuentra descuidada, de hecho, es la zona que mayor sufre cuando hay lluvias, ya que se vuelve intransitable por las inundaciones, además de que la semaforización está mal coordinada y cada 100 metros se puede encontrar la entrada a las diversas colonias que llegan hasta esta avenida, lo que la vuelve más lenta.
Pero con todo y sus problemáticas, la “Pancho Villa”, es hoy por hoy la avenida obligada de paso de los vallartenses, y cada vez más, se vuelve destino para quienes buscan algún producto o servicio en los cientos de establecimientos ahí ubicados, desde la avenida Francisco Medina Ascencio por un extremo, hasta el río Pitillal e ingreso al centro de la delegación por el otro.
