El peatón y su vulnerabilidad en la vía pública
Los adultos mayores son los más proclives a sufrir atropellamientos, ya que con la edad los movimientos son más lentos, las reacciones más tardías y pueden tener algunos problemas de visibilidad. También los menores son un foco rojo por su tamaño relativo al de los vehículos
Con motivo de la conmemoración del Día Mundial del Peatón este 17 de agosto, la Secretaría de Salud Jalisco (SSJ), a través del Consejo Estatal para la Prevención de Accidentes (CEPAJ), emite una serie de recomendaciones para caminar seguros en la vía pública y evitar las lesiones, discapacidad y muerte por atropellamiento.
“Todos en algún momento del día somos peatones y esto ofrece muchas recompensas. Cuanto más caminamos, más reducimos nuestro riesgo de enfermedades del corazón, derrames cerebrales, diabetes, cáncer, demencia, depresión, obesidad y otras causas de mala salud”, señaló el secretario técnico del CEPAJ, Yanik Nordin Servín.
Aseguró que “el peatón es el usuario más vulnerable en accidentes viales” y como prueba de ello expuso que “en la Zona Metropolitana de Guadalajara (ZMG), de enero a julio de este año, de nueve muertes por percances de tránsito, cuatro fueron transeúntes”.
Hasta el 31 de julio habían fallecido 202 personas por atropellamientos en la ZMG. Esto equivale al 46 por ciento de las muertes por accidentes viales en total. De las 202 defunciones, un 24 por ciento (49) estuvieron relacionadas con la ingesta de alcohol.
En el informe de la Organización Mundial de la Salud (OMS) sobre la situación de la seguridad vial de 2013 se afirma que más de 270 mil peatones pierden su vida en las carreteras del mundo cada año, comprendiendo un 22 por ciento del total anual de 1.24 millones de muertes por tráfico en carreteras.
Sumado a las muertes, millones de personas resultan heridas en colisiones por accidentes de tránsito mientras caminan, algunas convirtiéndose en discapacitados de forma permanente. Los daños incluyen trauma cerebral, lesiones de la médula espinal, fracturas, (especialmente en las extremidades inferiores) y laceraciones, que a menudo requieren largas estancias hospitalarias y meses (si no años) de rehabilitación. Debido a los altos costos de cuidado, los accidentes de tránsito pueden llevar a las víctimas y sus familias a la pobreza y abrumar los sistemas de salud ya frágiles.
Yanik Nordin Servín manifestó que “los adultos mayores son los más proclives a sufrir atropellamientos, ya que con la edad los movimientos son más lentos, las reacciones más tardías y pueden tener algunos problemas de visibilidad. También los menores son un foco rojo por su tamaño relativo al de los vehículos, limitaciones en el juicio en cuanto a la velocidad o distancia ante un vehículo y a la falta de supervisión”.
El secretario técnico del CEPAJ recordó que los lugares más seguros para cruzar son los pasos, puentes y semáforos peatonales, además de las esquinas. Los cuatro pasos que hay que considerar para atravesar la calle con seguridad son detenerse, mirar izquierda-derecha-izquierda, escuchar el entorno y pensar.
Yanik Nordin Servín también mencionó que cruzar corriendo la calle, lejos de permitir alejarse rápidamente de la situación de riesgo, compromete la atención, incrementa el peligro a tropiezos y caídas, y expone inútilmente la vida.
Es importante disminuir la velocidad de los autos cerca de las zonas escolares, escuelas, iglesias, zonas peatonales, centros culturales, centros comerciales y lugares de recreación (como los parques). Además, los conductores de vehículos de motor deben mantenerse atentos y respetar los pasos peatonales, disminuyendo la velocidad y cediendo el paso.
La OMS recomienda la adopción de nuevas leyes y el reforzamiento de las ya existentes para reducir el exceso de velocidad y detener a conductores ebrios, invirtiendo en infraestructuras tales como aceras, pasos peatonales elevados, topes, bandas sonoras e iluminación vial, mejorando el diseño de rutas de transporte público y optimizando sistemas de cuidado traumático.
