Frustró México plan para refugiar en Nayarit a hijo de Kadafi

 

El gobierno federal dio a conocer esta mañana la "desarticulación" de una "red delictiva" que pretendía ingresar a México de manera ilegal a Saadi Kadafi, hijo del expresidente de Libia, Muammar Kadafi, asesinado el 20 de octubre pasado, y otros tres miembros de esa familia.

 

 

Los movimientos fueron detectados desde el 6 de septiembre pasado y tres meses después se da a conocer públicamente el hecho, aunque no se identificó a ningún funcionario mexicano que eventualmente estuviera involucrado.

 

Los presuntos responsables de tramitar documentación falsa y tráfico ilícito de personas fueron detenidos el 10 y 11 de noviembre.

 

Alejandra Sota, vocera de la Presidencia de la República, dijo que con estas acciones el gobierno mexicano "contribuye de manera activa a una norteamérica segura". Con ello —añadió— México refrenda el principio de corresponsabilidad en materia de seguridad con la comunidad internacional.

 

Subrayó que esta operación se realizó de manera exitosa con base en acciones de la inteligencia mexicana que consiguió dos objetivos: "impedir la realización de un plan que permitiría internar ilegalmente a Saadi Kadafi, hijo del exgobernante Libio, así como de su familia en territorio nacional". Lo anterior, precisó, a partir de la labor de inteligencia obtenida el pasado 6 de septiembre.

 

En segundo término, dijo, se logró la desarticulación de una red delictiva que enfrentará a la justicia por la presunta comisión de delitos relacionados con el uso de documentación falsa, tráfico ilícito de personas y delincuencia organizada.

 

"Ambos objetivos alcanzados a partir de la esmerada labor de los servicios de inteligencia civil mexicanos así como la profunda coordinación del gabinete de seguridad enmarcada en esta operación huésped".

 

En un mensaje emitido en la Secretaría de Gobernación, Sota indicó que Saadi Kadafi es acusado por el gobierno de transición libio de estar al mando de las unidades militares que reprimieron a sus connacionales participantes en las manifestaciones ocurridas en meses pasados contra el depuesto régimen; por ello, Interpol emitió el pasado 19 de septiembre una ficha roja en contra de Saadi Kadafi para su sometimiento a la justicia.

 

De igual forma, añadió, esta persona es señalada por los países miembros de las Naciones Unidas con una resolución de prohibición de viajes y congelamiento de bienes, dictadas en febrero y marzo de este año.

 

Acompañada por el titular de Gobernación, Alejandro Poiré, la también vocera del gobierno federal para asuntos de seguridad, aseveró que la Operación Huésped, "sumados a otros logros de la estrategia nacional, son pruebas de la capacidad creciente de nuestras instituciones, en particular, de las áreas de inteligencia, así como de la responsabilidad para combatir al crimen organizado. Dijo que el Presidente Calderón extiende su reconocimeinto a estos agentes.

 

El secretario de Gobernación emitió algunos detalles de la Operación Huésped: el 6 de septiembre de 2011 inteligencia civil mexicana detectó un plan de internación ilegal de Saadi Kadafi y de su familia a territorio nacional.

 

Los agentes mexicanos, dijo, lograron desactivar este riesgo y desarticular esta "banda criminal de dimensión internacional que pretendía operar este ilícito y obtuvieron el arraigo de los presuntos responsables".

 

Señaló que las indagatorias revelan que el plan para introducir a México de manera ilegal a Kadafi y su familia a partir de otorgarles identidades falsas, con supuesta nacionalidad mexicana y las pesquisas permitieron tener conocimiento de que este ingreso se realizaría bajo nombres falsos; el proyecto incluía la compra de bienes inmuebles en Bahía de Banderas, Nayarit, que sería utilizada eventualmente como casa de seguridad.

 

"Los amplios recursos con los que cuenta esta banda criminal le permitió además fletar vuelos privados. Los traslados aéreos los utilizaban los presuntos miembros de la banda delictiva y se realizaban entre México-Estados Unidos-Canadá-Kosovo y diversos países de oriente medio para preparar la ruta y traslado del señor Kadafi a nuestro país", dijo Poiré.

 

Los arraigados son Cyntia Ann Vanier, canadiense, identificada como "lideresa del grupo" y "contacto directo con la familia Gadafi"; Gabriela Davila Huerta y/o Gabriela Dávila de Cueto, mexicana residente en Estados Unidos, "enlace logístico y con falsificadores de documentos"; Pierre Christian Fiensborg, danés, encargado de la logística, y José Luis Kennedy Prieto, mexicano encargado de conseguir la documentación apócrifa.

 

"Las actividades de la organización criminal en nuestro país incluyeron la falsificación de documentos oficiales, la apertura de cuentas bancarias con documentación apócrifa, compra de bienes inmuebles que tenían como uno de sus fines hospedar a la familia Kadafi en una casa ubicada en la zona de Bahía de Banderas, Nayarit, así como enlaces que facilitarían la seguridad y logística de la operación".

 

La Procuraduría General de la República, al tener información de uso de documentos falsos y tráfico ilícito de personas y delincuencia organizado detuvo el pasado 10 de noviembre en la ciudad de México a Cyntia Ann Vannier y al día siguiente a los otros presuntos responsables", indicó el secretario Poiré.

 

Los detenidos están hasta el momento en calidad de arraigo. Dijo que las representaciones consulares de los países de los detenidos han tenido pleno acceso a ellos.

 

Kadafi se encuentra actualmente en Níger, África.

 

La investigación en México continúa; Poiré destacó que esta operación constituye "una muestra más de la capacidad" de las instituciones de seguridad y procuración de justicia. "Este caso, logrado con inteligencia mexicana, es una muestra de ello porque México cuenta cada vez con instituciones más sólidas que realizan labores permanentes de inteligencia y trabajan en un marco de coordinación interinstitucional se fortalece la aplicación de la ley en nuestro país".